Las fusiones de estrellas de neutrones son una de las fuentes más prometedoras para estudiar el universo a partir de las ondas gravitacionales, pero son difíciles de detectar. Un nuevo método podría revolucionar este campo gracias a la inteligencia artificial.
El uso regular de ambas prácticas previene el deterioro cognitivo relacionado con la edad. Las habilidades cognitivas aumentan hasta los 40 años y luego declinan, excepto en quienes usan estas competencias frecuentemente. Estos hallazgos podrían influir en políticas públicas para poblaciones envejecidas.