Muchas especies de aves, protagonistas de #Cienciaalobestia, aprovechan la oscuridad de la noche para volar durante sus migraciones de primavera y otoño, pero también lo hacen en temporadas no migratorias. Un nuevo estudio demuestra que los niveles de contaminación lumínica que están en aumento en zonas de América del Norte y Centroamérica aturden a estos animales.