Los brotes de ébola más recientes han mostrado que este virus infeccioso también se encuentra en la superficie de la piel. Ahora, científicos de EE UU han rastreado como llega hasta ahí y sugieren que el contacto con este tejido externo puede ser una vía de transmisión entre personas.
Esta tecnología, basada en la naturaleza, permite incrementar la extracción del dióxido de carbono atmosférico y su almacenamiento en el océano. Un nuevo estudio analiza su impacto en la seguridad de los ecosistemas marinos.
El desarrollo de esta técnica permite detectar la proliferación de tumores cerebrales en modelos de roedor con una precisión sin precedentes. Este avance combina tecnología óptica avanzada y herramientas moleculares para iluminar el cerebro desde el interior sin necesidad de alterarlo.