El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, ha anunciado que irá a Copenhague a la cumbre del cambio climático con la propuesta de reducir en su país las emisiones de Co2 un 17%. Es menos de lo acordado por la Unión Europea, pero su presencia dará impulso a una conferencia que busca un nuevo tratado que limite las emisiones de gases de efecto invernadero, para el que ahora mismo no hay consenso.