Paul y Jane Bowles han vuelto a Málaga, la ciudad que amaban. Se cumplen ahora cien años del nacimiento del escritor, tan prolífico como enigmático. Nos dejo grandes novelas, pero fue El cielo protector, y la ambiciosa adaptación que hizo el maestro Bertolucci de la obra, la que descubrió a miles de personas la vida de este matrimonio amante del desierto africano, de Tanger y de Málaga, donde Jane murió. La ciudad los recuerda ahora con una serie de homenajes.
Paul Bowles fue ese novelista que componía música, ese músico que escribió novelas y ese viajero sin maletas. Junto a él, en cada viaje, en cada libro y en cada partitura estaba ella, Jane, que más que su compañera, fue la perfecta pareja para su literatura. Tánger fue su último destino y desde allí sembró palabras en el desierto para que Bernardo Bertolucci recogiera El cielo protector, la película que tenía por argumento su vida.
