El lodo tóxico y letal sigue amenazando a Hungría. El lamentable estado de los muros que quedaron a salvo de la balsa que ha provocado el desastre ecológico podría provocar una nueva riada y afectar a otra balsa contigua, repleta de sustancias tóxicas. Los expertos dan por hecho que esos muros van a desmoronarse, por eso ya se preparan más evacuaciones en los pueblos de una zona que tardará décadas en recuperarse.