Un hospital en el Reino Unido ha utilizado una arriesgada técnica para curar las arritmias a un bebé de sólo cuatro meses. Le enfriaron el corazón durante varios días y parece que ha dado muy buen resultado. Era la primera vez que aplicaban este procedimiento a un niño tan pequeño. El bebé ha pasado cuatro días a 33 grados, casi cinco grados por debajo de la temperatura normal del cuerpo humano. En Reino Unido lo han bautizado como el bebé congelado. Sobrevivir a una taquicardia ectópica congénita es muy difícil y además, es la primera vez que una hipotermia inducida funciona en un bebé tan pequeño.