En la Sierra de Atapuerca (Burgos) se encuentran algunos de los yacimientos arqueológicos y paleontológicos más excepcionales del mundo. El 16 de junio de 2004, un equipo de paleoantropólogos de Atapuerca descubrió el del Hundidero, un depósito en el que hallaron piezas de la industria lítica del Pleistoceno superior que demuestran la presencia de los primeros neandertales en esta región.
El Hundidero, en el término municipal de Orbaneja Ríopico, consta de cuatro niveles arqueológicos con distintas ocupaciones en cada uno de ellos. Las dataciones van desde los 70.000 años de antigüedad en el nivel más profundo, hasta los 56.000 años en los superiores.
Como sucede en el resto de asentamientos al aire libre, en el Hundidero no se ha recuperado fauna, únicamente las herramientas de piedra que empleaban los grupos de cazadores y recolectores para sus actividades cotidianas. La mayoría de los utensilios de caza encontrados están hechos de sílex, debido a que el yacimiento se asienta sobre depósitos de esta piedra.
El yacimiento se encontraba cerca de una laguna, que según los estudios polínicos realizados, estaba rodeada por pinos y avellanos. En ella también se han recuperado piezas en superficie con 70.000 años de antigüedad.
