Hasta el momento, los científicos sabían que en la biosfera profunda (a una profundidad de tres kilómetros en la corteza terrestre) habitaba un grupo de organismos unicelulares. Sin embargo, una investigación internacional, publicada en Nature, revela también la existencia de seres multicelulares: gusanos nematodos, que soportan las limitaciones de temperaturas, energía, oxígeno y espacio propias de esa zona.
Hallados a una profundidad de entre 0,9 y 3,6 kilómetros, en una fractura bajo el agua de las minas de Sudáfrica, los gusanos miden medio milímetro, se reproducen asexualmente y se alimentan de bacterias. Entre las especies, los expertos han encontrado una desconocida hasta el momento, Halicephalobus mephisto. Este estudio podría añadir nuevos datos sobre la evolución eucariota.