Coxiella burnetii provoca abortos en animales silvestres y domésticos, y puede afectar a los humanos como agente causante de la fiebre Q. Ante la posibilidad de que la transmisión entre animales se extienda, investigadores españoles han documentado los primeros casos de la bacteria en tres poblaciones de ciervo ibérico silvestre. Los resultados demuestran que la presencia es aún baja, pero son necesarios más estudios para analizar la dinámica de la enfermedad.