Hace tiempo que los paleontólogos se preguntan cómo conseguían los dinosaurios mantener una temperatura corporal estable, si se debía a su metabolismo, a la endotermia o a la temperatura exterior. Ahora, un equipo de científicos, liderados por Brian McNab, de la Universidad de Florida, ha elaborado un desarrollado un modelo que describe los gastos de energía de un vertebrado en función de la masa del organismo y los hábitos alimenticios. Este modelo, que permite explicar el tamaño corporal de mamíferos actuales y extintos, les ha permitido averiguar que el enorme tamaño de los dinosaurios seguramente se derivaba de la abundancia de recursos disponibles, unida a un bajo gasto de energía. Asimismo, McNab sugiere que los dinosaurios mantenían una temperatura intermedia entre los mamíferos y los reptiles, algo que le permitía su enorme masa. Sus resultados se publican en PNAS.