Un equipo del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) y la Universidad de Granada ha determinado que los moluscos elaboran el nácar de la misma manera en que se forman los cristales, capa por capa. En un comienzo lo hacen como si de un cristal líquido se tratara, y después lo solidifican añadiendo proteínas y minerales. Conocer de qué forma los moluscos llevan millones de años fabricando nácar, puede ayudar a reproducirlo de forma artificial en laboratorios, lo que tendría aplicaciones en nanotecnología y biomedicina, como su uso para la regeneración de huesos humanos.