Un equipo internacional de científicos ha descubierto que la enfermedad cutánea causada por el hongo Batradhochytrium dendrobatidis, que afecta a las poblaciones de ranas de todo el mundo, dificulta el flujo de sodio y de otros electrolitos de la piel y provoca una insuficiencia cardiaca en los anfibios. Este hallazgo podría sentar las bases de nuevos métodos para salvar a los anfibios en peligro de extinción.