Los líderes mundiales de la fabricación de grandes componentes nucleares se cuentan con los dedos de una mano. Entre ellos está la empresa pública española Equipos Nucleares (Ensa), que desde Cantabria sirve gigantescos generadores de vapor, tapas de reactor y contenedores de combustible a los principales grupos energéticos de países como Francia, China o EE UU. En tiempos de crisis, esta firma logró facturar 104 millones de euros el pasado año y exportó la mayor parte de su producción.