Un estudio de la Universidad de Temple, realizado con 24 mujeres mayores de 65 años, ha concluido que practicar yoga puede ayudar a prevenir las caídas y a mejorar el equilibrio. Las participantes en la investigación asistieron a un programa de yoga Iyengar específico para personas mayores, que les permitió incrementar su flexibilidad, equilibrio y confianza a la hora de caminar. Cerca de un tercio de la población anciana sufre algún tipo de caída al año, lo que convierte a este tipo de accidentes en una de las principales causas de lesiones y traumatismos de esta franja de edad