Hoy en Valencia el padre de la inflación cósmica, Alan Guth, ha reivindicado la vigencia de su teoría, ya sean correctas o erróneas las pruebas a su favor detectadas desde el Polo Sur por el telescopio BICEP2. Además de él, un millar de físicos hablan en la capital levantina de un mundo compuesto de infinitos universos paralelos, superaceleradores del futuro y materia oscura. Allí se celebra la Conferencia Internacional de Física de Altas Energías.