Desde que fueron identificados por primera vez en el intestino y las heces, los científicos han hallado microplásticos en cada rincón de nuestro cuerpo. El último ha sido el cerebro. Sin embargo, todavía no están claras las consecuencias de esta acumulación para nuestra salud.
La industria textil se erige como una de las mayores fuentes de estas partículas. A través del lavado de tejidos sintéticos, contaminan océanos y suelos y afectan a sus organismos. Además, se meten en la cadena alimentaria y pueden ingerirse a través del pescado y el marisco.
Cada año se vierten al medio natural millones de toneladas de fragmentos de plástico, una polución que se ha extendido por todo el planeta. Pero con miles de estudios publicados, los científicos aún están investigando cuáles son los efectos concretos de la contaminación microplástica en el medio ambiente.
Un equipo del ICM-CSIC, en colaboración con el Instituto de Investigación Biomédica de Bellvitge, ha creado dos nuevas herramientas de edición genética, cuyas patentes están en trámite. Los sistemas tienen características únicas respecto al más utilizado, el CRISPR Cas9 procedente de la bacteria Streptococcus pyogenes.
Chips y algoritmos bioinspirados replican comportamientos de insectos y otros animales para desarrollar robots más autónomos, eficientes y sostenibles. Investigadores y empresas exploran cómo la computación de arquitectura neuronal permite avances en percepción, navegación y control del movimiento.
Desde la pandemia, el número de prescripciones de medicamentos para el trastorno por déficit de atención e hiperactividad ha aumentado. Para varios científicos, la red social de vídeos cortos parece tener un efecto clave, tanto positivo como negativo.
Un estudio en la revista Science revela que la voladura de la presa de Kakhovka en la guerra de Ucrania liberó una “bomba tóxica de relojería” por la contaminación encerrada en los sedimentos del embalse, que se expandió por las tierras inundadas. Es un caso más de cómo el coste medioambiental de las guerras prolonga los daños una vez que terminan.
La Organización Mundial de la Salud y otros organismos tratan de impulsar el etiquetado de las bebidas alcohólicas con la advertencia de su riesgo cancerígeno, algo probado desde hace décadas. La ciencia actual derriba el mito de que beber con moderación no perjudica la salud.
El virus H5N1 está devastando la vida salvaje del planeta, con casos en 485 tipos de aves y más de 48 especies de mamíferos. En Sudamérica, ha matado a 20 000 elefantes marinos en la Península Valdés, en la Patagonia argentina, y diezmado el 41 % de la población del pelícano peruano. Los científicos temen su posible salto a humanos.
Huesos del pómulo y la mandíbula descubiertos en el yacimiento de la sierra burgalesa representan la presencia más temprana de la familia humana en el oeste de Europa, con una edad de 1,1 a 1,4 millones de años. En la revista Nature, los científicos asignan los restos a una especie afín al Homo erectus.
Varias decisiones tomadas por el nuevo ejecutivo estadounidense podrían dar alas a una variante especialmente preocupante de la gripe aviar, una plaga que ha saltado a gatos, vacas o humanos tras acabar con la vida de incontables aves.
Este enfoque integral analiza las interacciones entre seres humanos, animales y ecosistemas, fomentando la cooperación interdisciplinar para enfrentar amenazas sanitarias globales como las pandemias, la antibiorresistencia o el cambio climático. Asimismo, puede mejorar la atención en consultas sobre salud mental y violencia de género.
Aunque la presencia de agua en Marte está sobradamente probada, durante décadas se ha debatido si existieron grandes océanos en condiciones de habitabilidad. Un nuevo estudio con datos del rover chino Zhurong ha descubierto una antigua costa marciana donde pudo surgir la vida en la misma época en que esto ocurrió en la Tierra.
Si la menstruación en el planeta Tierra está poco estudiada, imagínense fuera de él. A día de hoy, la regla aún es suprimida con hormonas antes y durante las misiones espaciales.
Un estudio de investigadores alemanes avanza en una idea ya antigua pero poco explorada: encontrar microbios en otros mundos utilizando un cebo molecular que permita observar cómo se mueven. Desde las sondas marcianas Viking en 1976, ninguna misión espacial ha buscado vida directamente fuera de la Tierra.
Un equipo del Instituto Geológico y Minero de España que estudia las avenidas pretéritas, ocurridas en escenarios similares al actual de calentamiento global, contribuye a mejorar la definición de las áreas con riesgo de anegamiento en los próximos planes de gestión.
Esta enfermedad mata a casi 10 millones de personas cada año en el mundo, y la cifra aumentará a lo largo de este siglo. Pero estas muertes no se reparten por igual entre las regiones del globo y los distintos tipos de tumor. La investigación, la prevención y la detección temprana son vitales en la lucha contra esta lacra.