La anunciada reforma de la ley de medidas sanitarias contra el tabaquismo ha levantado ampollas entre los hosteleros. La actual legislación, que entró en vigor en 2006, permitió reducir la exposición al humo ambiental en los lugares de trabajo, mientras que en los locales de restauración y hostelería se dejó un amplio margen de decisión sobre el consumo de tabaco a sus titulares. De llevarse a cabo los cambios sugeridos por el Gobierno, los tres de cada cuatro establecimientos que sirven alimentos y bebidas y que a día de hoy permiten fumar en sus instalaciones se verán obligados a vetar el cigarrillo.
Un estudio publicado en Gaceta Sanitaria ha visitado a lo largo de 2008 una muestra representativa de 1.130 locales de restauración de Barcelona. Los resultados constatan que tres años después de la entrada en vigor de la ley de medidas sanitarias frente al tabaquismo, el 75,4% de estos establecimientos siguen siendo con humo, el 3% tiene habilitadas zonas para no fumadores y tan sólo en el 21,6% está totalmente prohibido fumar. Esto es así pese a que en general el cumplimiento de la ley en esta ciudad es elevado: la mayoría de estos locales que permiten fumar puede hacerlo.
La normativa parece haber cuajado de distinta forma en las diferentes tipologías de locales dedicados a la alimentación. En el 85,7% de los comercios con degustación, como panaderías o pastelerías, se prohíbe el tabaco, porcentaje elevado aunque la legislación obliga a cumplirlo en la totalidad de estos establecimientos. Por su parte, en el 85% de las franquicias o cadenas de comida rápida han decidido adoptar una política libre de humo, a pesar de que la ley les permite habilitar zonas para fumadores.
La otra cara de la moneda la encontramos en los bares-cafeterías o cafeterías-restaurantes, donde en el 90% de los casos se permite fumar, mientras que los restaurantes se sitúan en un punto intermedio, ya que el 30,7% son libres de humo y el 9,3% ofrece zonas separadas para fumadores y no fumadores. La mayoría de estos locales son de pequeñas dimensiones y pueden optar.
El estudio, dirigido por Joan R. Villalbí, de la Agencia de Salud Pública de Barcelona, también ha podido determinar que los distritos céntricos (Ciutat Vella y Eixample, en el caso de Barcelona) son los que concentran el 43% de los establecimientos de restauración y los que tienen una mayor oferta de locales sin humo (24,1% frente al 8,2% en el resto de distritos). Como último dato, los negocios situados dentro de un centro comercial suelen estar en general más libres de humo que los que se encuentran a plena calle (81,8% frente al 14,8%).
Los resultados muestran el valor preventivo que tendrá un cambio de la ley como el propuesto por el Ministerio, apoyado unánimemente desde los medios profesionales y científicos del campo de la salud.
-----------------
Referencia bibliográfica:
Villalbí JR, et al., "El tabaco en los establecimientos de restauración y hostelería: estudio observacional en Barcelona", 2008. Gaceta Sanitaria, 2009. doi:10.1016/j.gaceta.2009.07.010