¿Quieres echar una mano a alguien que no puede salir de casa por el coronavirus? ¿Necesitas algo? Una nueva herramienta de software libre ha sido puesta en marcha en tiempo récord por la empresa Kaleidos y la plataforma social 'Frena la curva' con el fin de coordinar ofertas y peticiones de ayuda en España. Instituciones de países de Latinoamérica quieren replicar la iniciativa.
Los momentos que estamos viviendo con la crisis provocada por el coronavirus están produciendo una gran cantidad de iniciativas solidarias por parte de la ciudadanía española. La semana pasada contamos en SINC los detalles de un proyecto para desarrollar respiradores de bajo coste. Y ahora acaba de lanzarse un mapa on line que busca tender un puente entre personas con necesidades debidas a las medidas de confinamiento y voluntarios, instituciones y comercios que puedan solucionarlas.
Este nuevo proyecto está siendo coordinado por la organización ciudadana contra el coronavirus Frena la curva y cuenta con el apoyo tecnológico de Kaleidos. Según comenta a SINC Pablo Ruiz Múzquiz, CEO y cofundador de esta empresa de software, “tan solo 48 horas después de ser lanzado se registraron 25.000 visitas y 1.000 punto de atención”.
“En Kaleidos nos encargaremos de la tecnología de la plataforma y de su financiación. También ayudaremos con la difusión. Por su parte, Frena la curva se ocupará de coordinar el equipo de voluntarios que moderaran todas las peticiones y se coordinaran con iniciativas de voluntariado o apoyo vecinal ya existente”, detalla Ruiz Múzquiz.
El mapa web busca poner en contacto apersonas con alguna necesidad durante el confinamiento y voluntarios, instituciones y comercios que puedan solucionarlas. / Kaleidos
A través del mapa se pueden anunciar ofertas y peticiones de ayuda, “potenciando así la acción vecinal para llegar a personas sin acceso a móvil u ordenador”, dice este directivo.
“Estoy de baja por coronavirus, vivo sola y no puedo salir, necesito que alguien me haga la compra semanal y de farmacia”, dice una de las peticiones. En cuanto a los ofrecimientos de los voluntarios, van desde los que muestran su disponibilidad para ir al supermercado, cuidar niños o simplemente conversar.
Al mapa on line se puede acceder a través de cualquier navegador o de una app. Mediante un sencillo formulario, se pueden subir, de forma anónima, peticiones u ofrecimientos de ayuda.
Además, también se incluye información sobre servicios públicos disponibles, como mercados o farmacias con horarios modificados, clínicas veterinarias abiertas, centros sociales que ofrezcan comidas, estaciones con aseo para transportistas, etc.
Otros servicios que se están añadiendo son los los bancos de alimentos, “algo que en los próximos días puede ser muy importante”, la posibilidad de asistencia domiciliaria a personas mayores de los ayuntamientos, los centros de atención para mujeres, los servicios de asesoramiento psicológicos, etc.
Con objeto de llegar a las personas que precisen ayuda, pero no tienen acceso a la tecnología, la plataforma va a impulsar la figura del intermediario, es decir, voluntarios que de una manera proactiva, localizan a estas personas.
Para ello, se dan varias ideas: desde llamar al presidente de la comunidad para ‘mapear’ un edificio, a colgar un mensaje desde la ventana. Los intermediarios también pueden ser familiares con personas dependientes en otras provincias, personas de colectivos de riesgo o en cuarentena que no puedan salir, pero si pueden hacer otras labores como llamar por teléfono a vecinos con necesidades o avisar de la existencia de personas vulnerables.
En Frena la Curva Maps además del mapa, hay un curso para los moderadores voluntarios, pautas sobre cómo usar esta herramienta y varias recomendaciones para maximizar la seguridad de los usuarios.
Detalle de una petición de ayuda. / Kaleidos
Tras el éxito obtenido en las primeras horas, “el equipo de moderadores está trabajando para asegurarse de que todas los puntos que aparecen en el mapa cumplen con los requisitos de seguridad”. Por ejemplo, explica Ruiz Múzquiz, “no se da información específica de direcciones de domicilios”.
El CEO señala que, inicialmente han visto cómo “han ido apareciendo cientos de chinchetas verdes, que es el color que representa el ofrecimiento de ayuda, pero ahora están empezando a surgir las rojas y naranjas, que corresponden a peticiones de ayuda. La clave ahora es organizarnos para facilitar la comunicación y hacer partícipes a las ONG y asociaciones con experiencia asistencial”, recalca.
Adicionalmente, los impulsores del proyecto están teniendo reuniones con instituciones de países de Latinoamérica que quieren replicar la iniciativa. “Les estamos ayudando para que les resulte fácil clonar la plataforma para sus países y que así puedan aprovechar la ventaja de una semana de antelación, que, en esta crisis, sabemos que es muy bienvenida”, destaca.
Captura de un ofrecimiento de ayuda. / Kaleidos
La plataforma es fácilmente replicable y exportable a otros países, con un coste bajo de mantenimiento, gracias a que está basada en herramientas de software libre. Se espera que países como Colombia, México, Costa Rica, Argentina y otros países lancen también sus propios mapas en breve.
La tecnología en la que está basado el mapa on line de colaboración y ayuda ciudadana se basa en la plataforma Ushahidi, una herramienta open source pensada para mapear información vital en zonas de catástrofe. Esta aplicación se ha utilizado con éxito en varias crisis humanitarias, como después del terremoto de Haití o el de Chile (ambos en 2010). La información se visualiza cargando mapas de OpenStreetMap. Las peticiones que se suben son revisadas por moderadores voluntarios antes de que aparezcan en el mapa.
El CEO comenta que en los últimos días han entrado en contacto con distintas iniciativas que querían ayudar y están coordinando esfuerzos, “así que esperamos ver muchísimos más puntos en el mapa pronto”.
Por otro lado, Kaleidos, cuya política empresarial es generar un impacto positivo en la sociedad con tecnologías libres, anunció en SINC hace unas semanas el desarrollo de una la ‘app’ para vigilar las casas de apuestas con colaboración ciudadana.
Toda la labor de recopilación de datos a pie de calle ha quedado interrumpida. “Congelamos la beta de BetOver. No queremos animaros a mapear las calles, sino a quedaros en casa. Entre todos podemos #FrenarLaCurva. Mientras, seguiremos trabajando en la app desde casa”, dicen en su cuenta de Twitter.