Acaba de nacer AFBIA, una asociacioón que integra 27 empresas, centros tecnológicos y universidades, y cuyo objetivo es convertirse en un cluster tecnológico nacional en el ámbito de la biotecnología alimentaria.
AFBIA, cuya acta fundacional se aprobó el pasado 27 de marzo, ha nacido hoy oficialmente para incrementar la competitividad de la industria agroalimentaria española mediante el uso de la biotecnología en el diseño, producción y comercialización de productos y servicios, potenciar la vinculación empresarial en el ámbito biotecnológico, generando un espacio colaborativo para el desarrollo y utilización de la biotecnología en el ámbito alimentario, propiciar el conocimiento de la biotecnología por parte de los agentes empresariales, económicos y sociales, y fomentar el diseño y lanzamiento de nuevos servicios biotecnológicos de interés para el sector alimentario.
El Ministerio de Industria ha calificado la agrupación como “excelente” y ha respaldado la iniciativa, reconociéndola como 'Agrupación Empresarial Innovadora'.
Las empresas y organismos socios de AFBIA funcionarán como proveedores de equipamiento para el desarrollo de procesos biotecnológicos, empresas de ingeniería, proveedores de servicios de diagnóstico mediante técnicas basadas en biología molecular y biosensores, productores de aditivos y/o microorganismos de interés industrial, empresas productoras de alimentos, y centros privados y públicos de I+D+i.
La Junta Directiva de AFBIA está formada por Exxentia Grupo Fitoterapéutico en calidad de presidencia, Biopartner, Laboratorios Ordesa, Alimentos Funcionales de Origen Tradicional, Sistemas Genómicos como vocal tercero, Valentia Biopharma y AINIA centro tecnológico, que ostenta la secretaría de la asociación.
El estudio de la Universidad Complutense de Madrid revela que una tercera parte de los productos etiquetados como gambas y langostinos no se corresponde con la especie indicada. La investigación, que analizó el ADN de diversas muestras, destaca la prevalencia de este problema en productos congelados.
No es solo por el exquisito sabor del cacao. Investigadores de la Universidad de Leeds (Reino Unido) han comprobado que los ingredientes del propio chocolate interactúan con la saliva, generando una suave película grasa que recubre la lengua y hace que este producto se sienta cremoso durante todo el tiempo que permanece en la boca.
