Los modelos matemáticos se convierten en un instrumento científico de relevancia en un país como España y en una comunidad como Aragón, en particular, con terrenos muy secos y temperaturas muy elevadas que favorecen la aparición de fuegos que se propagan a gran velocidad. Hoy en día es posible predecir con bastante exactitud cómo va a evolucionar un incendio. Parámetros como la temperatura, el grado de inclinación del monte y características del viento son determinantes para poder describir con un alto nivel de precisión la evolución, por ejemplo, de un incendio forestal.
El catedrático y director del Instituto Universitario de Matemáticas (IUMA) de la Universidad de Zaragoza, Antonio Elipe, ha destacado esta mañana la importancia de los modelos matemáticos a la hora de predecir el curso de fenómenos naturales, como los incendios, durante la inauguración del congreso internacional “Matemáticas y Fuego”, que desde el lunes se celebra en el campus aragonés.
Los modelos matemáticos intentan reproducir la evolución de los incendios, mediante fórmulas y ecuaciones que describen el fenómeno en cuestión. La mayor parte de las predicciones futuras sobre el nivel del mar, la intensidad o la distribución de las lluvias, los huracanes o la temperatura del planeta al final del siglo XXI se basan en modelos matemáticos que describen las leyes de la naturaleza y en la simulación de distintas realidades posibles.
Escribir en lenguaje matemático las leyes de la naturaleza es imprescindible. De ahí, que cuanto más se conoce sobre los fuegos registrados hasta ahora, más ajustados serán los modelos que los describen y mejor se podrá intervenir para hacerles frente.
Cerca de 50 expertos de todo el mundo desde matemáticos, ingenieros de aeronáutica, de montes, naval, físicos, técnicos de medio ambiente y expertos en extinción de incendios analizan esta semana la trascendencia de los modelos matemáticos a la hora de dar pautas que permitan actuar de un modo más eficaz para atajar aquellos incendios ya originados.
Durante la jornada de hoy los expertos han abordado entre otros casos modelización de incendios considerables como, por ejemplo, el gran incendio que se originó a raíz de los atentados contras las Torres Gemelas en Nueva York. También se han analizado grandes incendios por su extensión geográfica, como los ocurridos en los últimos años en California, gran destrucción de edificios o los que han tenido lugar en las grandes praderas de Australia.