La organización ecologista Oceana ha descubierto una decena de especies animales y vegetales, hasta ahora eran desconocidas, en las islas Canarias. Esponjas cristal y piedra, corales bola, blancos y negros o peces armados son algunas de las especies halladas, a las que se suman especies raras o de las que se conoce muy poco sobre su biología. El hallazgo forma parte de la campaña del catamarán Oceana Ranger en el archipiélago canario.
El descubrimiento es el resultado preliminar del primer mes de campaña del Oceana Ranger que, en colaboración con Fundación Biodiversidad, estudia los fondos marinos alrededor del archipiélago canario para conocer y documentar zonas que por su importancia ecológica deberían convertirse en áreas marinas protegidas.
“El desconocimiento de las comunidades existentes a grandes profundidades es uno de los mayores problemas a la hora de decidir las zonas que deben ser protegidas. La estrecha plataforma existente alrededor de las islas hace que los fondos caigan rápidamente hasta los 1.000 y 3.000 metros, dificultando su conocimiento”, ha declarado Ricardo Aguilar, director de Investigación y Proyectos de Oceana Europa.
Según el Convenio de Diversidad Biológica de las Naciones Unidas, en 2012 se debería haber establecido una red de áreas marinas protegidas que protejan al menos el 10% de la superficie marina. En la actualidad, en las islas Canarias sólo el 0,15% de la superficie marina está protegido.
Las doce especies descubiertas han sido filmadas en vivo. Entre las especies raras destacan cabrachos y rapes de profundidad, gallos plateados y rosas, corales abanico, gorgonias batiales, anémonas atrapamoscas, esponjas chupa-chups, etc.
La campaña pretende registrar las diferentes especies de tiburones y rayas presentes en las islas, porque su presencia ha sufrido un rápido descenso. Hasta ahora, Oceana ha identificado cinco especies de tiburones (martillo, zorro, marrajo, cazón y angelote) y cinco especies de rayas (chucho negro, chucho amarillo, mantelina, ratón y águila).
Tecnología punta bajo el mar
El robot submarino de Oceana documenta las comunidades que habitan en profundidades entre los 40 y los 500 metros de profundidad. Mediante inmersiones con buceadores, estudian las zonas costeras de poca profundidad, “donde es sorprendente la disminución en la abundancia de peces y la expansión del erizo diadema (Diadema antillarum), una de las principales amenazas del archipiélago”, han señalado desde la organización.
Hasta el momento, la tripulación del Oceana Ranger ha realizado unas 40 inmersiones en las 6 de las 7 islas (Lanzarote, Fuerteventura, Gran Canaria, Tenerife, la Gomera y La Palma). El segundo mes de campaña empieza en las aguas de El Hierro y se volverá a visitar todas las islas.
“Estamos muy contentos de la acogida que ha tenido esta iniciativa entre ONG y científicos que llevan años trabajando para promover la conservación de los hábitats marinos en el archipiélago”, ha subrayado Xavier Pastor, director Ejecutivo de Oceana Europa.
Entre los otros objetivos de la campaña destaca el apoyar con información científica la inclusión en la red europea Natura 2000 de algunos Lugares de Importancia Comunitaria. Entre ellos se encuentran Cagafrecho (Lanzarote), Mogán, Arinaga-Gando y Sardina del Norte (Gran Canaria), Teno (Tenerife), Valle Gran Rey (La Gomera), Garafía (La Palma) y Mar de las Calmas (El Hierro) y la ampliación de Anaga (Tenerife), Jandía o Isla de Lobos (Fuerteventura) y Los Órganos (La Gomera).