Aunque la orden de los coleópteros (escarabajos) es la de mayor diversidad de todo el reino animal - contiene más de 350.000 especies, 66 veces más que los mamíferos -, la identificación de nuevos géneros y especies tiene mucha relevancia. Un investigador de la Universidad de León ha logrado identificar, en Costa Rica (Centroamérica), 10 géneros y 20 especies anteriormente no citadas.
A partir de una colaboración entre las universidades de Costa Rica y León, Roberto Blanco, investigador del área de Zoología del Departamento de Biodiversidad y Gestión Ambiental de la institución leonesa, accedió a una beca para analizar la coleopterofauna acuática costarricense, según explica el propio investigador en la revista Ambiociencias que publica el artículo científico.
Los escarabajos suponen un grupo de gran interés para los científicos, ya que sirven para determinar el grado de conservación de diferentes hábitats. Por ello, el análisis y descripción de esta fauna está desarrollada en muchos países, lo que facilita las labores de gestión del territorio de diferentes entornos naturales. Sin embargo, en Costa Rica la disciplina no está muy extendida.
Blanco realizó su estancia en la reserva biológica Alberto Manuel Brenes, un espacio para la investigación científica en la selva costarricense en la que los científicos analizan las plantas, hongos y líquenes, aves, artrópodos, reptiles y anfibios, edafología, climatología, fitoquímica y la divulgación de este entorno natural.
Pequeñas dimensiones mantenían el anonimato
En un primer análisis, a partir de las primeras capturas, el investigador observó que había encontrado dos géneros (Celina e Hydaticus) anteriormente no citados. "Se da la circunstancia que los especímenes encontrados eran de unas dimensiones que los hacían pasar desapercibidos, por lo que me pregunté cuáles serían los resultados de un muestreo por todo el territorio nacional de Costa Rica", explica el investigador.
La tesis se centró en siete provincias costarricenses en hábitats compatibles con la existencia de adéfagos acuáticos. "Los adéfagos son el segundo suborden de coleópteros más numeroso, con unas 40.000 especies", apunta el estudio. Analizadas las muestras recolectadas en el país, el científico añadió estos 10 géneros y 20 especies a la literatura científica procedente de la reserva biológica Alberto Manuel Brenes. En la actualidad, el biólogo analiza el material de estudio recopilado para comprobar si existen nuevas especies encontradas para la ciencia.
Además de este trabajo taxonómico, el científico ha establecido y ampliado áreas de distribución de diferentes coleópteros en el país centroamericano. "Se da la circunstancia de que algunas especies están recogidas en colecciones de museos y otras instituciones, pero no estudiadas y citadas bibliográficamente", advierte el autor. El trabajo, por lo tanto, se encamina a configurar un corpus documental de este tipo de insectos. El científico cree que existen "grandes posibilidades" de ampliación de conocimiento de los adéfagos acuáticos en Costa Rica.