Investigadores de la Universidad de Alcalá (UAH) desarrollan un sistema de visión artificial capaz de reconocer la orientación de una cara sin necesidad de identificación ni entrenamientos previos.
La novedad principal que aporta este software respecto a otros desarrollos existentes en este campo es que se trata de un modelo automático o no supervisado. El sistema, diseñado por los estudiantes de post-grado Pedro Jiménez y Jesús Nuevo bajo la tutela de Luis Miguel Bergasa, director del departamento de Electrónica de la Universidad de Alcalá, es capaz de detectar y hacer un seguimiento de una cara humana en tiempo real y sin necesidad de identificar previamente a la persona ni de entrenamientos específicos previos, por lo que es más económico que otros sistemas que precisan de modelos anteriores, y más versátil porque no limita los usuarios. Una fase posterior del proyecto es la determinación de la pose de la cara y su orientación.
El objetivo final es monitorizar al conductor o piloto desde el interior del vehículo o simulador para mejorar los sistemas de seguridad (alertas por falta de atención, somnolencia, airbags que al accionarse saben cuál es la posición en ese momento de la persona, etc.).
El sistema, que funciona en tiempo real grabando 30 imágenes por segundo, se basa en seguir una treintena de puntos estables del rostro, creando con dos cámaras un modelo en 3D. Con esa distribución de puntos-modelo en tres dimensiones el software busca la situación de cada punto en la imagen siguiente, obteniendo un desplazamiento, y por lo tanto un recorrido, de los mismos.
Otra novedad que aporta este sistema frente a otros es la combinación de tres algoritmos: SMAT, POSIT Y RANSAC. “”Es muy robusto y sólido frente a cambios de iluminación, gestos y oclusiones. Aunque con un nivel de precisión menor, responde perfectamente ante situaciones para las que el modelo no está especialmente preparado, como giros de cabeza muy pronunciados”, señala Nuevo.
Pedro Jiménez y Jesús Nuevo trabajan en este proyecto desde hace dos años, y actualmente investigan la extensión automática del modelo, hasta ahora sólo formado por puntos del frontal de la cara, a otro que incluya también referencias laterales.