Congelar los óvulos para el futuro en aquellas mujeres que quieren posponer su embarazo es más efectivo cuando se hace entre los 20 y los 35 años. Así lo advierten los expertos en medicina reproductiva durante las primeras sesiones del 7º Congreso Internacional del IVI, que tiene lugar estos días en Bilbao. Los ovocitos van perdiendo calidad con los años.
Entre el 15% y el 20% de parejas heterosexuales en España sufre problemas de fertilidad. En busca de un hijo, muchos se someten durante años a tratamientos como la fecundación in vitro. Sin embargo, a lo largo de este proceso a veces sus miembros se separan o, incluso, alguno de los dos fallece. La legislación española es clara: los embriones pertenecen a ambos progenitores y es necesario el acuerdo mutuo para tomar cualquier decisión sobre su futuro.
Según un estudio del Instituto Valenciano de Infertilidad, cuando una mujer intenta ser madre con óvulos vitrificados de una donante, las probabilidades de éxito se acumulan cuantos más consuma, y se estancan a partir de los 40 óvulos. El trabajo se ha presentado en la reunión anual de la Sociedad Europea de Reproducción Humana y Embriología, celebrada en Múnich. Otro estudio español revela que la mayor parte de las parejas de reproducción asistida prefiere mellizos.