Cada vez es más habitual leer en el móvil o en la tablet, comprobar los últimos mensajes o echar un vistazo a las redes sociales antes de dormir. Una investigación de la Universidad Complutense de Madrid demuestra que dedicar un tiempo prolongado a esta práctica aumenta nueve de los diez síntomas visuales y oculares más frecuentes, como visión borrosa, irritación y sequedad ocular.
La dislexia no tiene cura, pero un tratamiento correcto y precoz puede mejorar notablemente la capacidad lectora y de comprensión de los afectados. Así lo indica un nuevo estudio, publicado en la revista Biomedical Signal Processing and Control, que sostiene que el porcentaje de disléxicos es muy superior entre los hablantes de lenguas opacas, como el inglés y el francés.
Investigadores españoles han desarrollado una aplicación para Facebook gracias a la cual podrán observar la capacidad visual de usuarios de todo el mundo y ver que parámetros influyen en ella.
Los restos de un artrópodo de hace 515 millones de años han revelado que poseía 30.000 lentes en cada ojo, más que una libélula. Esto le convierte en la especie con mayor agudeza visual que se conoce hasta el momento. Los restos fósiles estudiados señalan que se trataba además del depredador más grande del periodo Cámbrico.
Con la primera lectura de una palabra, el cerebro la codifica visual y fonéticamente. Cuando el término se aprenda, será reconocido solo de forma visual, como si fuera un objeto sin parte sonora, lo que agiliza el proceso lector. A esta conclusión han llegado científicos estadounidenses que confían en que su hallazgo ayude a corregir problemas como la dislexia.
Las personas registran las imágenes de forma distinta, independientemente de su agudeza o problemas visuales. Un nuevo estudio, publicado en el último número de la revista PLoS ONE, muestra que el ojo humano se podría adaptar a un nuevo grado de emborronamiento tras sufrir enfermedades o correcciones ópticas.
La imagen representa la navegación de varias moscas (cada color equivale a un ejemplar) y el modo cómo aprenden a usar las señales visuales para ir de un punto A a un punto B (los círculos representan el proceso de aprendizaje). Al final de este proceso (círculo de la esquina derecha), las moscas tienen una trayectoria mucho más directa hacia su destino. Foto: T. Ofstad; M. Reiser; C. Zuker; M. Williamson
El estudio demuestra que un chisme negativo hace más probable que veamos una cara que si no teníamos información sobre ella.
No hay más que fijarse en las imágenes gráficas que utilizaban hace 30 años las diputaciones y los ayuntamientos de las capitales de la CAV, para darse cuenta del enorme salto que han dado desde entonces. Algunos de ellos (Bizkaia, Bilbao, Álava/Araba) han dejado el escudo institucional en un segundo plano, mientras que otros (Donostia-San Sebastián, Gipuzkoa, Vitoria-Gasteiz) lo han cambiado y simplificado.