Los vasos campaniformes son un tipo de cerámica que creó una cultura en la prehistoria europea. Los científicos llevan un siglo discutiendo si su uso en Europa occidental se extendió a través de prácticas sociales o por la migración de personas. Ahora un análisis del ADN de 400 esqueletos de aquella época revela que las dos hipótesis son acertadas: de Iberia al centro de Europa esta cerámica se difundió por intercambio cultural, pero a las islas británicas la llevaron los colonizadores desde el continente.