Un estudio liderado por el Instituto Max Planck de Geoantropología, con participación del CENIEH, revela que el Homo sapiens vivió en los bosques densos y húmedos de África mucho antes de lo que se pensaba. La investigación retrasa la evidencia más antigua conocida sobre la presencia humana en estos entornos.
Los árboles pueden llegar a vivir más de mil años y sus respuestas a las perturbaciones humanas no siempre son inmediatas. Investigadores de Brasil y Australia han realizado un estudio experimental en comunidades de árboles amazónicos de un bosque fragmentado y han comprobado un empobrecimiento general de la diversidad filogenética.
Las primeras selvas tropicales de la Tierra.