Un grupo de científicos, con participación del CSIC, revela una reducción del 50 % del ruido sísmico generado por la actividad humana como consecuencia de las medidas de confinamiento. En el estudio, publicado ahora en la revista Science, se recopilan datos de más de 300 estaciones de registro de todo el planeta.
Investigadores de la Universidad Politécnica de Madrid proponen un enfoque novedoso para detectar el deterioro de la superficie del pavimento utilizando el ruido que generan los neumáticos en la carretera.
Investigadores de la Universidad de Huelva han demostrado que los patrones de sonidos de una ciudad turística costera se corresponden con el comportamiento y los hábitos de la población. Los resultados del estudio pueden aplicarse como claves para la acústica forense, ya que con los datos registrados podrá determinarse si un cierto ruido corresponde a un día hábil o a fin de semana en distintas estaciones.
Investigadores de la Universidad de Granada y del Instituto Andaluz de Astrofísica han estudiado por primera vez la música de una estrella pulsante con la ayuda de fractales. Según los científicos, estos astros emiten un continuo rumor susurrante de fondo. Con un algoritmo han logrado aislar la música estelar del ruido de una manera eficiente y sencilla para identificar mejor las estrellas variables.
Investigadores de la Universidad Politécnica de Madrid han desarrollado un sistema de análisis de texto que, aplicado a los comentarios publicados en las redes sociales, detecta y clasifica las quejas sobre contaminación acústica de forma automática. El sistema combina la inteligencia artificial con técnicas de análisis de lenguaje.
Un incremento de 10 dB en la media de ruido al que se está expuesto supone un 17% más de obesidad. Así concluye un nuevo estudio, publicado en Environment International, que subraya cómo la exposición sostenida al ruido es un problema de salud pública y es más grave de lo que se cree.
El ruido suele ser una molestia, pero investigadores de la Universidad Carlos III de Madrid y otros centros internacionales han descrito un efecto de este tipo de ondas de sonido que se puede emplear en la decodificación y creación de señales extremadamente débiles.
Un nuevo estudio ha analizado los factores ambientales a los que se han expuesto 30.000 mujeres embarazadas de nueve ciudades europeas. Los resultados, publicados en la revista Environmental Health Perspectives, muestran diferencias en función de la posición socioeconómica en los territorios estudiados.
Investigadores de la Universidad Politécnica de Madrid han desarrollado y patentado un nuevo tipo de pantalla acústica, práctica y económica, con materia procedente de la poda de plantas, como las palmeras. Además de proporcionar una reducción significativa del ruido, reduce el impacto ambiental y paisajístico.
Investigadores de la Universidad de Córdoba han creado un sistema para predecir el sonido de los motores diésel a partir de la composición fisico-química del combustible. Modelos computacionales están detrás del avance.