Los mismos genes que se activan ante la falta de nutrientes inducen el estado durmiente de las yemas en las plantas para detener la formación de nuevas ramas. Este patrón de expresión génica para impedir el crecimiento en situaciones de ayuno se mantiene tanto en plantas herbáceas como leñosas. Es lo que indica un estudio de investigadores del Centro Nacional de Biotecnología del CSIC (CNB-CSIC).
Para los agricultores uno de los aspectos fundamentales para mejorar el rendimiento de sus cultivos es el patrón de ramificación de las plantas. Un estudio español ha permitido identificar varios genes que regulan la formación de nuevas ramas en función de la luz ambiental. Según los científicos, conocer estos procesos moleculares en detalle es importante para desarrollar métodos de control del crecimiento de las plantas y optimizar la producción agrícola.
Las plantas tienen diferentes mecanismos para adaptarse al ambiente donde viven. Un grupo de científicos del Centro Nacional de Biotecnología ha descubierto cómo las especies del género Solanum modulan el crecimiento de nuevas ramificaciones en función de la presencia o ausencia de luz y de hormonas vegetales. Los responsables son dos productos diferentes del gen BRANCHED1a.