Una investigación internacional sugiere que la inhibición de la proteína NKX2-3 podría ser una estrategia terapéutica selectiva en el linfoma de la zona marginal, que representan el 10% de los linfomas B, un tipo de tumor hematológico. NKX2-3, una proteína implicada en el desarrollo de la enfermedad de Crohn, hasta la fecha no se había asociado con el desarrollo de cáncer.