Unos 3,7 millones de kilómetros cuadrados, una superficie equivalente a dos veces el estado de Alaska o un poco más la de la India, se encuentran bajo intensa presión humana debido a la construcción de carreteras, la agricultura y la urbanización, entre otros. Pero no se trata de un territorio cualquiera, sino de áreas protegidas. Un nuevo estudio señala que esta es una de las principales razones del catastrófico declive de la biodiversidad.
Para conservar a bajas temperaturas las sustancias biológicas, como órganos o espermatozoides, los expertos se ayudan de la fuerza de la presión, que dificulta que este biomaterial se congele y quede inservible. Los científicos desconocían por qué la presión dificultaba la formación de hielo, pero ahora acaban de averiguar el motivo, un avance que mejorará los procesos de criopreservación.
Un estudio internacional, con participación española, ha demostrado que la ola de calor que afectó a Europa en el verano de 2010 fue más cálida e intensa que la de 2003. La investigación señala que grandes olas de calor como la de 2010 podrían volver a ocurrir a partir de 2050 e incrementar su frecuencia hacia finales de siglo como consecuencia del calentamiento global.
Las personas que poseen una variante genética hasta ahora desconocida padecen un 15% menos de los riesgos de sufrir hipertensión y enfermedades cardiovasculares, como accidentes cerebrovasculares, infartos de miocardio y muerte coronaria. Uno de cada cuatro adultos de la Unión Europea (UE) sufre hipertensión, la primera causa de muerte en todo el mundo.
El chocolate, como el que contiene los huevos de Pascua, puede tener efectos beneficiosos para su salud, al menos en cantidades pequeñas, según ha demostrado un estudio publicado hoy on line en el European Heart Journal. Tomar un trozo pequeño de chocolate al día puede ayudar a reducir la presión arterial y el riesgo de enfermedad cardiovascular.
El medicamento LCZ696 es un receptor de la angiotensina (ARA) II y un inhibidor de la neprilisina (ARNI) que funciona de dos formas: permite que la sangre fluya más fácilmente y hace que los vasos sanguíneos se relajen y ensanchen, con lo que se reduce la tensión sanguínea. Ahora, un estudio confirma que es un "tratamiento satisfactorio para la hipertensión" que reduciría el consumo de medicamentos para este problema de salud.
Los genes no son los únicos responsables de la carcinogénesis. Un equipo de investigación del Instituto Curie acaba de demostrar que una presión mecánica podía modificar la expresión de los genes y, en particular, activar los oncogenes Myc y Twist, dos factores tempranos responsables del desarrollo del cáncer de colon.