En la actualidad, la principal causa de muerte infantil en el mundo no es una enfermedad infecciosa, sino el parto prematuro. Cada año, 1,09 millones de niños menores de 5 años mueren por complicaciones relacionadas con haber nacido antes de las 37 semanas completas de embarazo. La revista Science Traslational Medicine dedica esta semana su editorial a analizar estas cifras.