Un equipo internacional de científicos con participación española ha desarrollado herramientas genéticas en más de 14 especies de microeucariotas marinos, llamados protistas, unos organismos entre los que se encuentran algunos de los parientes unicelulares más cercanos de los animales. El estudio permitirá estudiar el origen y evolución de formas de vida complejas.
La sonda Dawn de la NASA ha detectado por primera vez material orgánico en Ceres que, junto al amoníaco, agua helada, carbonatos y sales de su superficie, ofrecen los ingredientes para el nacimiento de la vida. Además los científicos piensan que estos compuestos prebióticos son nativos, es decir, que no los trajo ningún objeto externo.
Asteroides y cometas pueden haber desempeñado un papel esencial en la difusión por el universo de los elementos esenciales para la vida, una fuerza que surge del cosmos, de las estrellas. Esta es la propuesta del astrofísico Josep María Trigo (Valencia, 1970) del Instituto de Ciencias del Espacio (ICE, CSIC-IEEC) en su libro Las raíces cósmicas de la vida, que acaba de presentar en el Planetario de Madrid.
Algunos componentes básicos del ADN descubiertos en meteoritos se podrían haber creado en el espacio, según un nuevo estudio financiado por la NASA y que publica la revista PNAS. Los autores han encontrado bases nitrogenadas parecidas a las del ADN y que no estaban en el entorno donde se localizaron los meteoritos, además de probar en el laboratorio cómo se pueden crear estas moléculas.