Junto al anuncio de los diez científicos más relevantes de 2018, la revista Nature ha destacado otros cinco que podrían serlo en 2019. Los protagonistas son un virólogo congoleño empeñado en acabar con el ébola, una abogada que denuncia la falta de implicación de EE UU contra el cambio climático, una ingeniera india involucrada en el envío de un nuevo rover a la Luna, una astrofísica estadounidense que trata de cazar ondas gravitacionales con púlsares y una bióloga argentina que analiza la biodiversidad a escala global.
Días después de que el experimento LIGO difundiera la primera detección de ondas gravitacionales, el 11 de febrero de 2016, Mauricio Macri, presidente de Argentina, saludó a su compatriota Gabriela González: “El honor es mío, hablo con la científica de la semana... o del año… o de varios años”. Sinc habla con la investigadora que dio la bienvenida al comienzo de una nueva era.
La colaboración científica LIGO y Virgo ha anunciado la detección de cuatro ondas gravitatorias fruto de la fusión de agujeros negros de masa estelar. La Universitat de les Illes Balears ha contribuido a la observación y análisis de las señales. Los observatorios publican el primer catálogo de acontecimientos de ondas gravitacional.
Las colaboraciones científicas LIGO y Virgo han detectado ondas gravitacionales procedentes de la fusión de dos agujeros negros, inaugurando una nueva era en el estudio del cosmos. ¿Pero y si esas ondulaciones del espacio-tiempo no las hubieran producido agujeros negros, sino otros objetos exóticos? Físicos españoles presentan una alternativa: agujeros de gusano, que se pueden atravesar para aparecer en otro universo.
Como cada año, la revista Science ha elegido los descubrimientos y novedades más importantes en ciencia de los últimos doce meses. La detección de ondas gravitacionales y radiación por la fusión de dos estrellas encabeza la lista de 2017, donde también figura una nueva especie de orangután, la criomicroscopía electrónica, los avances en la edición genómica y la lucha contra el cáncer, así como un diminuto detector de neutrinos y los primeros fósiles de Homo sapiens.
Investigadores de las universidades de Jaén y Barcelona han descubierto por primera vez una estructura en forma de Z en un microcuásar. El hallazgo se puede extrapolar al estudio de radiogalaxias y el fondo de ondas gravitacionales que, según sugiere el estudio, podría ser más débil de lo estimado hasta ahora.
Cuando los agujeros negros chocan entre sí, provocan un fenómeno tan violento que su eco es capaz de llegarnos miles de millones de años después a través de ondas gravitacionales. El análisis de estas señales nos permite saber cómo nacieron estos gigantes del cosmos. Dos premios Nobel de Física de este año avanzan a Sinc lo que llegaremos a conocer sobre estos misteriosos cuerpos en los próximos años.
Este lunes se ha hecho público un anuncio científico espectacular: la primera detección de ondas gravitacionales y radiación procedentes de la colisión de dos estrellas de neutrones. Investigadores españoles forman parte de la colaboración científica LIGO-Virgo que ha liderado el descubrimiento, así como de algunos de los cerca de 70 observatorios espaciales y terrestres que han participado en este hito.