Investigadores de la Universidad de Córdoba han diseñado una nueva manera de producir moldes que permite a las pymes mejorar su creatividad. El método, barato y de fácil manejo, incluye el uso de chapas metálicas revestidas con un recubrimiento antiadherente.
Investigadores de las Universidades de Jaén y Granada trabajan en la puesta a punto de una impresora y células madre diferenciadas a condrocitos (células de cartílago) para crear moldes en 3D. Esta técnica denominada bioprinting consigue estructuras destinadas a la reparación de tejidos heridos.