El momento y el patrón de migración de los primeros humanos modernos ha sido una fuente frecuente de discusión e investigación. Ahora, un nuevo estudio liderado por la Universidad de Oporto (UP, Portugal) y la Universidad de Leeds (Reino Unido) basa su investigación en el análisis genético para buscar pistas sobre la migración de estos primeros humanos modernos que salieron de África hace más de 60.000 años.
La integración morfológica, determinada genéticamente, dirige la evolución de la forma del cráneo humano, según un artículo publicado en la revista Evolution. El trabajo se basa en el estudio de 390 cráneos de la colección de los denominados cráneos decorados de la iglesia católica de Hallstatt (Austria), en la que participan investigadores de la Universidad de Barcelona