Un equipo del Instituto de Investigación Vall d’Hebron ha descubierto un microRNA capaz de reducir el crecimiento tumoral en neuroblastomas, un tumor que afecta principalmente a niños de 0 a 4 años y que es resistente a los tratamientos convencionales. El descubrimiento, realizado en modelos celulares y animales, podría servir para el desarrollo futuro de nuevas terapias basadas en microRNAs, unas pequeñas moléculas de ARN que regulan la expresión de genes específicos.
Como las serpientes, las células tumorales mudan la piel. Y es que el cáncer no es una enfermedad estática sino que en su desarrollo va acumulando transformaciones para evadir las defensas naturales de nuestro organismo, adaptarse a las nuevas circunstancias del entorno, protegerse contra la quimioterapia y radioterapia y progresar hacia la invasión de órganos vecinos, causando finalmente metástasis.
En un subgrupo de tumores del colon, estómago y útero las células cancerosas secuestran un grupo de moléculas antitumorales dentro de sus núcleos impidiendo que maduren y realicen su función en la célula, según el trabajo del programa de Epigenética y Biología del Cáncer del Instituto de Investigación Biomédica de Bellvitge (IDIBELL) que se publica hoy en la prestigiosa revista Cancer Cell.
En un estudio realizado con la mosca Drosophila, investigadores del Instituto de Investigación Biomédica (IRB Barcelona) liderados por el investigador ICREA Marco Milán han descubierto que la maquinaria de microRNA controla los niveles de Myc a través de la molécula Mei-P26, otorgando a los microRNA un protagonismo inesperado. El trabajo se publica esta semana en EMBO Journal, revista científica del grupo Nature y de gran impacto en investigación biomédica básica.
Un trabajo recién publicado en la edición online de la prestigiosa revista Proceedings of the National Academy of Sciences (PNAS) describe la existencia de un nuevo nivel de regulación de la metamorfosis de los insectos. Sus autores, Xavier Bellés y de Eva Gómez, director e investigadora del Instituto de Biología Evolutiva (IBE, CSIC-UPF), utilizaron la cucaracha Blatella germanica para realizar el estudio. Sus resultados demostraron la importancia de los denominados microRNAs en el control del desarrollo de estos insectos, en particular, en la transición de la fase de ninfa a la de adulto durante su proceso de metamorfosis.