Investigadores de la Universidad Politécnica de Madrid han desarrollado y patentado un método que, en pocas horas, permite conocer si la bacteria causante de la legionelosis se encuentra en el aire que respiramos. Su rápida detección, en menos de 24 horas, podría evitar la aparición de brotes de legionelosis.
Científicos de la Universidad de Valencia y la Fundación para el Fomento de la Investigación Sanitaria y Biomédica de la Comunidad Valenciana han liderado un análisis genómico de las cepas de Legionella pneumophila de 13 brotes producidos en Alcoy en el periodo de 1999 a 2010.
Un estudio liderado por el centro vasco de investigación en biociencias, CIC bioGUNE, en el que también han participado grupos del Instituto Nacional de Salud (NIH) de EE UU y del Centro Nacional de Supercomputación de Barcelona (BSC), ha descrito por primera vez un mecanismo que ayuda a la bacteria Legionella pneumophila a camuflarse en las células humanas.