Miembros del Centro Nacional de Aceleradores, en Sevilla, han cuantificado por primera vez las pérdidas de partículas energéticas o iones rápidos que se producen en un reactor tokamak de fusión nuclear, como el del experimento ITER que es construye en Francia. Estas perdidas puede disminuir la eficiencia y calidad del plasma del reactor e incluso dañarlo.