Esta semana se ha presentado en Barcelona el proyecto europeo BrainCom, que con un presupuesto de 8,35 millones de euros aprovechará las propiedades únicas del grafeno y otros materiales orgánicos para desarrollar una tecnología radicalmente nueva de implantes corticales ultraflexibles. Sus resultados ofrecerán soluciones para rehabilitar pacientes con trastornos en el habla gracias a innovadoras interfaces cerebro-ordenador.