La prostitución suele llevar el estigma de ser uno de los principales focos de infección del VIH. Sin embargo, un estudio publicado en Gaceta Sanitaria y realizado con trabajadoras del sexo en Cataluña entre 2005 y 2011 sitúa en torno al 2% el número de mujeres infectadas. A pesar de la estabilización de la enfermedad entre el colectivo, los datos también apuntan a una posible relajación en las conductas de prevención y a un aumento de la prevalencia de otras infecciones de transmisión sexual.