Un trabajo, con participación del CSIC, indica que estos cambios dependen de la deforestación, el calentamiento global, la duración de la estación seca y la disminución de las lluvias.
Un reciente artículo sobre antiguas ‘ciudades’ en la Amazonía ecuatoriana, portada de la revista Science, ha puesto de actualidad una revolución que se viene descubriendo en los últimos años. La imagen estática que se tenía de esta región, con pequeños poblados y estructuras simples, hay que cambiarla por la de un territorio vibrante, lleno de comunidades conectadas, con una planificación urbanística y producciones agrícolas amplias en el pasado.
En una extensa área selvática de Ecuador, arqueólogos de ese país y de Francia han localizado más de 6.000 montículos rectangulares, agrupados en diversos asentamientos, con una red de caminos, plazas y canales en un entorno agrícola. El estudio, portada de la revista Science, evidencia un urbanismo prehispánico en el Alto Amazonas desde hace 2.500 años.
Un equipo de investigación internacional con participación española ha compilado el conjunto de datos genómicos más grande de Brasil para demostrar que las comunidades sambaqui en las costas sur y sureste no representaban una población genéticamente homogénea. El estudio lo atribuye a diferentes trayectorias demográficas, posiblemente debido a contactos regionales con grupos del interior.
Tras analizar más de 3.000 conflictos socioambientales en todo el mundo, científicos de una decena de universidades confirman el impacto negativo que tiene el desarrollo industrial sobre las formas de vida, las tierras y los derechos de las comunidades indígenas.
Durante este fin de semana, los ciudadanos han tomado las calles de todo el mundo para alzar su voz y participar en las distintas marchas que han tenido lugar tras la primera semana de la Cumbre de Clima de Glasgow. Su objetivo: que los líderes mundiales se tomen en serio la crisis climática y acuerden medidas ambiciosas para limitar el aumento de la temperatura global a 1,5ºC.
El hallazgo en Utah (EE UU) de unas semillas carbonizadas de tabaco alrededor de una antigua hoguera del Pleistoceno sugiere que la planta pudo utilizarse 9.000 años antes de lo que se creía, mucho antes de su domesticación. El estudio permitiría entender qué impulsó el cultivo y uso de esta sustancia tóxica.
Una investigación explora el impacto de las misiones europeas en los nativos de California central, con más de 30.000 registros históricos y bioarqueológicos que van desde el 3050 a.C. hasta 1870 d.C. La violencia, esclavitud e inseguridad alimentaria aumentaron la vulnerabilidad de la población local a enfermedades.
El reconocimiento de los derechos y la capacidad de decisión de los pueblos indígenas y las comunidades locales es fundamental para abordar la actual crisis de biodiversidad. Así lo revela un equipo internacional de científicos, liderado por españoles, en el que piden al Convenio sobre la Diversidad Biológica que los reconozca plenamente, no solo como partes interesadas.