Esta obra de referencia que da información sobre las funciones gramaticales de los distintos elementos de la definición en textos reales incluye, en esta versión, términos de este mismo año 2023. Amplía los lemas que incorporaba la anterior y ofrece una versión digital con diferentes niveles de profundidad en su análisis y varias capas de consulta.
Investigadores de la Universidad de Huelva han comprobado los efectos positivos que provoca la utilización de actividades didácticas guiadas por canciones y videoclips en el conocimiento de otro idioma.
Cuando el contexto lo permite, las personas bilingües mezclan espontáneamente sus lenguas, lo que hace que su expresión verbal sea más rápida y ágil. Según un nuevo estudio, el uso libre de los dos idiomas al comunicarse puede exigir menos esfuerzos cognitivos que tener que usar uno solo.
Más de 30 millones de tuits y la base de datos de Google Books han servido a investigadores de la Universidad de las Islas Baleares para estudiar la distribución, tanto espacial como temporal, de las variantes británicas y americanas del inglés. Los resultados revelan que 23 de los 30 países anglófonos analizados utilizan más el inglés americano que el británico.
Una investigación de las universidades de Córdoba y Pablo de Olavide muestra beneficios de la enseñanza bilingüe en francés. En un trabajo con estudiantes bilingües en francés en Andalucía se ha observado que este colectivo mejora tanto sus capacidades lingüísticas como las habilidades apropiadas en el terreno académico en general, como la discursiva, la argumental o la de enumeración, respecto al alumnado monolingüe.
Detrás de los conceptos que transmiten las palabras y las relaciones que se establecen entre ellas parece existir una estructura universal común a todas lenguas, que no depende de la cultura o el entorno geográfico, sino de la facultad cognitiva humana. Esto es lo que muestran las redes semánticas generadas por un equipo internacional de investigadores con el vocabulario de más de 80 idiomas.
Investigadores de Estados Unidos y Australia han desarrollado un ‘hedonímetro’ que permite analizar el contenido emocional del lenguaje. Tras estudiar 100.000 vocablos de 10 idiomas diferentes, han determinado que, en positividad, el español se sitúa a la cabeza de las lenguas.
El lugar de un idioma en las redes lingüísticas globales contribuye a la visibilidad de sus hablantes y los contenidos culturales que producen, mucho más que la riqueza de su país. Investigadores de EEUU y Francia lo han demostrado estudiando la estructura idiomática de tres redes: Twitter, Wikipedia y libros traducidos en varios idiomas. Tras el inglés, destacan el español, el alemán, el francés, el ruso, el portugués y el chino.
Una investigación de la Universidad Nacional de Educación a Distancia (UNED) demuestra que, para aquellas personas que están empezando a estudiar alemán, Twitter es una herramienta útil, puesto que mejora la competencia escrita. Además, la red social promueve la espontaneidad y la solidaridad entre los estudiantes.
Un equipo de investigadores del Centro Max Planck de Psicolingüística de Nijmegen (Holanda) ha analizado el uso de una interjección que denota falta de entendimiento en diez idiomas de todo el mundo. Su pronunciación es muy similar en todos ellos.