Tras un seguimiento de 20 años a más de 3.300 personas, un equipo de científicos liderados por el Instituto de Salud Global de Barcelona ha establecido una relación entre determinadas exposiciones en el ámbito ocupacional y el riesgo de padecer enfermedad pulmonar obstructiva crónica. El 21% de los casos detectados de esta patología estuvo asociado con exposición a polvos orgánicos, gases, humos y pesticidas.
La eliminación de los “superpolluters” reduciría un 25% la contaminación por nanopartículas