Un nuevo estudio sobre la grasa parda señala que este lípido ayuda a eliminar los aminoácidos ramificados básicos y esenciales, unas moléculas orgánicas que en grandes cantidades pueden provocar diabetes tipo 2 u obesidad. Esta investigación abre la puerta al estudio de nuevos medicamentos contra estas enfermedades.
Científicos españoles han abierto una nueva vía para luchar contra la obesidad. El hallazgo, que también ha dado buenos resultados para la diabetes 2, demuestra que aumentando la presencia de la proteína GRP78 en el hipotálamo de ratas obesas se consigue transformar la grasa blanca en parda, un fenómeno conocido como browning y que produce la disminución de peso de estos animales.
Un nuevo estudio en ratones sugiere cómo el tejido adiposo marrón de los roedores –presente también en humanos– se ve afectado por el aumento a la exposición de la luz artificial. Los resultados, publicados en la revista PNAS, indican que esta variación se asocia con enfermedades vinculadas con la obesidad.
Investigadores de la Universidad de Santiago de Compostela han descubierto un nuevo mecanismo molecular que afecta al aumento de peso y a la aparición de diabetes. El equipo ha demostrado, en un experimento con ratas, que las ceramidas, una familia de lípidos que forma parte de las membranas celulares, pueden afectar ciertas áreas del hipotálamo interfiriendo los mecanismos que regulan la actividad del tejido adiposo pardo.
Investigadores estadounidenses han descubierto una nueva estrategia para combatir la obesidad: un interruptor biológico que convierte la grasa blanca, la grasa que almacena calorías, en grasa parda, que las quema. Este hallazgo, publicado en la revista Cell Metabolism, subraya que el cambio se produce principalmente en un ambiente con muchos estímulos sociales y físicos.