La empresa Felguera Construcciones Mecánicas (FCM), filial del grupo Duro Felguera, inicia el envío a EEUU, Alemania y Francia de tres equipamientos para el tratamiento del cáncer que se encuentran a la vanguardia de la tecnología internacional. El taller de Barros (Asturias) donde se han fabricado las máquinas, llamadas gantries, ha sido pionero en la fabricación de estos equipos en España, que permitirán aplicar la terapia de protones contra el cáncer en centros médicos de referencia internacional. Con este envío, la compañía culmina un proyecto que se inició a principios de 2007.
En la fotografía, uno de los gantries en el taller de FCM en Barros (Asturias). Imagen cedida por Felguera Construcciones Mecánicas.
Desde el Valle del Caudal, cerca de Mieres, más de cuarenta investigadores afilan los ojos hacia los paisajes asturianos, el presente y futuro de las zonas mineras, o los usos de la costa atlántica, entre otros temas. Internacional como el desarrollo del turismo en lugares no explotados y cercano como el ritmo de una ciudad cantábrica, el Cecodet (Centro de Cooperación y Desarrollo Territorial de la Universidad de Oviedo) lleva doce años escuchando las relaciones del hombre con su entorno.
José María Alameda Maestro coordina el grupo de investigación de láminas delgadas y nanoestructuras magnéticas ordenadas de la Universidad de Oviedo. Su amplia experiencia no le resta empuje para nuevas aventuras: este mes ha organizado en la capital asturiana la novena edición del Congreso Tendencias en Nanotecnología, al que han acudido más de 300 congresistas de veinte países. Con la conversación ágil de quien está acostumbrado a la reflexión, Alameda valora el rumbo de la investigación en nanotecnología y ofrece algunas claves para mejorar la innovación de las empresas españolas.
Unos 150 científicos de todo el mundo han tomado Asturias. La causa del abordaje, que durará hasta el sábado, es la primera reunión en Europa de los dos principales organismos internacionales especialistas en petrología orgánica y del carbón, el ICCP y el TSOP. En el marco de esta segunda cita de la historia, investigadores del Instituto Nacional del Carbón (INCAR-CSIC, que organiza el Congreso), exponen su trabajo junto a los responsables de los principales laboratorios internacionales en la materia. La contribución asturiana va de los hidrocarburos a la joyería y de ahí, al cambio climático, entre otros temas.
José María Alameda Maestro. Fotografía: FICYT
La International Conference on Coal and Organic Petrology. ICCP-TSOP Joint Meeting concentrará en Oviedo a más de 150 científicos de unas treinta nacionalidades. Será entre el 21 y el 27 de septiembre, en la segunda reunión (primera en Europa) de las dos principales asociaciones científicas en la materia, el ICCP (International Comitee for Coal and Organic Petrology) y el TSOP (The Society for Organic Petrology).
La máquina más compleja jamás construida acaba de arrancar cerca de Ginebra. Es el LHC, el Gran Colisionador de Hadrones. Entre la aportación española, investigadores de la Universidad de Oviedo y empresas asturianas han invertido largas horas de trabajo en este flamante equipamiento del CERN (Laboratorio Europeo de Física de Partículas). Junto a ellos, diez mil investigadores de todo el mundo dirigen ahora su atención hacia el acelerador de partículas que permitirá observar la materia como nunca antes y que desvelará nuevas claves sobre el universo y sus fuerzas fundamentales.
La máquina más compleja jamás construida acaba de arrancar cerca de Ginebra. Es el LHC, el Gran Colisionador de Hadrones. Entre la aportación española, investigadores de la Universidad de Oviedo y empresas asturianas han invertido largas horas de trabajo en este flamante equipamiento del CERN (Laboratorio Europeo de Física de Partículas). Junto a ellos, diez mil investigadores de todo el mundo dirigen ahora su atención hacia el acelerador de partículas que permitirá observar la materia como nunca antes y que desvelará nuevas claves sobre el universo y sus fuerzas fundamentales.