El 10% de los adultos jóvenes tienen una función pulmonar baja, por lo que su pulmón no se ha desarrollado bien, según un estudio de investigadores del instituto Clínic-IDIBAPS. Esta deficiencia podría aumentar el riesgo de aparición de otras enfermedades crónicas, como la enfermedad pulmonar obstruida crónica o la diabetes, así como de mortalidad prematura.
Un grupo de investigadores catalanes ha comprobado que los días en los que los niveles de contaminación atmosférica son más elevados en el área metropolitana de Barcelona se producen más infartos de corazón graves, más casos de fibrilación ventricular y más mortalidad por infarto. Según los expertos, reducir en 10 ug/m3 las partículas en suspensión de menos de 2,5 micras (PM 2,5) permitiría evitar como mínimo cada año y solo en la ciudad de Barcelona 19 infartos de miocardio.
Desayunar poco o nada duplica el riesgo de aterosclerosis, independientemente de otros factores de riesgo cardiovascular, según un estudio realizado por investigadores españoles. Saltarse esta comida podría servir como indicador de un estilo de vida poco saludable.
La insuficiencia cardíaca es la principal causa de hospitalización en mayores de 65 años. Para mejorar la prevención y el tratamiento de esta patología, un equipo de científicos españoles ha identificado una adecuada expresión de los genes termogénicos presentes en el tejido adiposo epicárdico como factor protector contra la dolencia.
Investigadores españoles han encontrado que la proteína ApoD desarrolla su función en los lisosomas, vesículas tradicionalmente implicadas en eliminar la llamada basura celular. El trabajo se ha publicado en PLoS Genetics.
Los astronautas de las misiones Apolo, los únicos humanos que han salido de la protectora magnetosfera terrestre, muestran mayor tasa de mortalidad por enfermedades cardiovasculares que aquellos que han volado en órbitas más bajas. Así lo recoge un estudio de investigadores estadounidenses, donde se apunta que la radiación del espacio profundo afecta negativamente al endotelio de los vasos sanguíneos.
Científicos españoles han diseñado una escala para predecir el riesgo de insuficiencia renal en los pacientes que se someten a cirugía cardiaca. Su objetivo es evitar complicaciones graves, que se producen frecuentemente en estas intervenciones, de manera que se puedan tomar medidas preventivas oportunas y mejorar la atención de estos pacientes.
Según un nuevo estudio, la carga de la mortalidad cardiovascular y respiratoria del ozono podría ser mucho mayor de lo que previamente se había reconocido. La exposición a largo plazo al ozono aumenta el riesgo de morir por enfermedad pulmonar en un 12%, por enfermedad cardiovascular en un 3% y por otras causas en un 2%. Para los autores, los resultados dan una imagen más clara sobre los efectos dañinos de la contaminación del aire.
Investigadores estadounidenses han estudiado por primera vez el impacto en adultos del consumo de bebidas azucaradas a escala mundial, que en 2010 causaron 133.000 fallecimientos por diabetes, 45.000 por enfermedades cardiovasculares y 6.540 por cáncer. El mayor porcentaje de muertes se produjo en la zona de Latinoamérica y el Caribe y, por edades, fue mayor entre los menores de 45 años.
Un equipo de investigadores de la Universidad Politécnica de Cataluña (UPC), en colaboración con la California State University, han demostrado por primera vez que la transición en la alternancia cardiaca, una arritmia potencialmente mortal, comparte características con el ordenamiento ferromagnético de los metales. La investigación ayuda a entender mejor cómo se origina la muerte súbita y abre la puerta a diseñar nuevos fármacos para evitarla.