Podríamos pensar que un reptil no es capaz de imitar una acción realizada por un humano, pero el dragón barbudo, protagonista de nuestro #Cienciaalobestia, lo conseguiría por sus grandes habilidades sociocognitivas. Un estudio revela por primera vez que estas capacidades podrían disminuir en la edad adulta cuando siendo huevos los lagartos son incubados a mayores temperaturas.
Las poblaciones silvestres de dragones barbudos australianos (Pogona vitticeps) son susceptibles a la reversión sexual causada por el aumento de las temperaturas, según un estudio que publica la revista Nature. Este cambio en el que el sexo no viene determinado por los cromosomas sino por la temperatura de incubación de los huevos ya se había reportado en lagartos, pero ahora se demuestra por primera vez en estos reptiles en estado salvaje.