El 60 por ciento de alrededor de mil profesores de biología de las escuelas públicas de nivel secundario de los Estados Unidos no está a favor de la enseñanza de la biología evolutiva, pero tampoco de otras alternativas no científicas, revela una investigación aparecida en la revista ‘Science’. Otra encuesta, realizada entre profesores de biología de Argentina, reveló que un alto porcentaje se siente disconforme frente a la ausencia o la poca profundidad con que se aborda la biología evolutiva en los programas de estudios del profesorado.
Ante los nuevos lobbys creacionistas y la influencia que empieza a tener en España, el científico mexicano, primer latinoamericano que preside la Sociedad Internacional para el Estudio del Origen de la Vida (ISSOL por sus siglas en inglés), plantea que el creacionismo no es una teoría científica, sino un movimiento político e ideológico. Para el reconocido biólogo, las religiones cristianas, por contra, tienen una tradición filosófica e intelectual muy refinada que está al margen del creacionismo, que nació en EEUU de la derecha ultraconservadora.